En un albergue respetuoso con el medio ambiente y que utiliza sus recursos para satisfacer las necesidades propias, la armonía y tranquilidad que se respira está en consonancia con su estilo de vida. En un ambiente acogedor, con una cuidada y esmerada alimentación que ofrece cenas vegetarianas y procura adaptarse a las necesidades de otras intolerancias la estancia gozará de relajación y meditación. Es costumbre que al atardecer durante una clase de yoga que ofrecen a los peregrinos se contemple la puesta de sol (si las condiciones meteorológicas lo permiten) desde su jardín con unas magníficas vistas.
Desde este albergue te llevaras paz y tranquilidad.
Precio exclusivo para peregrinos acreditados del Camino de Santiago.